Denuncian contagios de médicos y enfermeros en el Durand
El sábado, el Hospital Fernández fue noticia por la confirmación de al menos dos contagios por coronavirus entre el personal de salud. El domingo, hubo alerta en otro centro porteño de referencia: el Hospital General de Agudos Carlos G. Durand. Según fuentes oficiales de la institución, actualmente habría solo un enfermero infectado, mientras dos médicos -que contrajeron la enfermedad hace aproximadamente veinte días- estarían cerca del alta. A su vez, alegan que los servicios funcionan con normalidad. Sin embargo, los trabajadores indican que existen más afectados.
El pasado 6 de mayo, el juez Marcelo Fernández ordenó testeos a todo el personal para determinar el número real de casos de Covid-19. Fue a raíz de un amparo presentado por la abogada Mariana Chiacchio, del Centro de Abogados por los Derechos Humanos. “Habría seis confirmados, solo del fin de semana”, dijo Claudio Ibero, enfermero de guardia del Durand de los fines de semana desde hace 14 años. El hombre se desempeña además como docente en la Fundación Favaloro; es autor de dos libros; dirige la Especialización en Enfermería en la Atención del Paciente Crítico Adulto de la Universidad de Tres de Febrero; y da clases en la Universidad Nacional del Comahue y cursos de posgrado de ventilación mecánica en la Universidad Nacional de Salta.
De acuerdo con Ibero, en el laboratorio central del hospital figuran los pedidos de tests rápidos desde hace días, pero los hisopados aún no se realizaron. El enfermero, con 30 años de trayectoria, denuncia irregularidades. “No hubo ninguna comunicación de los directivos del hospital convocándonos con fecha y hora”, asegura. A su vez, cuenta que falta información sobre la cantidad de pacientes atendidos y fallecidos por coronavirus. “No hay datos centralizados”, agrega.
“Hoy estamos en primera fila, poniendo el cuerpo. No negamos nuestra vocación, el compromiso, ni las obligaciones: pero tenemos derechos”, reflexiona Ibero. Según él, varios de los colegas contagiados dependen de más de un trabajo, debido a la baja remuneración de la profesión que, desde una ley de 2018, es considerada como “personal administrativo”.
Aunque destaca que por el momento el hospital provee los insumos necesarios y facilidades para atender de manera segura a los pacientes, entiende que hay problemas. “Necesitamos más gente y menos carga laboral. Hacemos guardias de 12 o 14 horas. A veces el trabajo te excede. Cuando estás agotado, empezás a bajar la barrera. Por ejemplo, si estoy en el shockroom con dos pacientes, y cada vez que entro debo ponerme doble guante, barbijo de triple filtrado y todas las protecciones, necesito tiempo: si uno está solo, no lo tiene”, concluye.