Un niño queda en grave estado tras caer al sótano de un restaurante en Saavedra
Lo que era un domingo tranquilo y feliz se convirtió repentinamente en una tragedia para una familia. En la tarde de este 6 de diciembre, Máximo, un niño de 5 años de edad, cayó al sótano de un restaurante ubicado en Saavedra y quedó internado en grave estado. De acuerdo al relato de testigos, la tapa del mismo estaba abierta, y cuando la víctima iba al baño situado dentro del local, sucedió la dramática caída.
El hecho sucedió en “Whoopies”, localizado en García del Río y Roque Pérez, frente al Parque Saavedra, en un local que había abierto en este año. En ese área se encuentran distintos puestos gastronómicos, que suelen estar llenos en los días de fin de semana con buen tiempo como el día domingo.
La información se conoció a través de las redes sociales, cuando la madre de Máximo relató lo sucedido. “Tenían abierto el sótano y mi hijo cayó adentro. A la tarde estaba feliz y sonriente comiendo una cajita feliz y ahora está así”, narró, junto a dos fotografías que mostraban el “antes y después”.
“Mi hijo venía caminando y pisó en falso. La entrada al sótano estaba destapada y no se encontraba señalizada”, siguió la madre de Máximo. El menor fue trasladado de urgencia al Hospital Pirovano, donde recibió las primeras atenciones, y luego se lo derivó al Hospital Pedro Elizalde, ex Casa Cuna. Por la noche de la jornada posterior se supo que su evolución es buena, dentro de un cuadro complejo, que incluye la fractura de cráneo y lesiones encefálicas.
“No tengo que estar pasando por esto. Él debería estar mirando dibujitos ahora, y está peleando por su vida. Esto fue una negligencia, se podría haber evitado”, fueron otras de las palabras de la más cercana familiar de la víctima.
Una gran polémica se generó cuando, una vez conocida la tragedia, “Whoopies” siguió abierto durante toda la jornada. Recién cerró este lunes 7 de diciembre, cuando un grupo de personas se congregó en la puerta del mismo para impedir que atienda al público. De acuerdo a documentos oficiales, el local se encuentra habilitado por el Gobierno de la Ciudad, aunque la Agencia Gubernamental de Control prometió revisar el caso.
Por ahora no hay personas imputadas respecto al hecho. Mientras tanto, la Fiscalía en lo Penal y Contravensional Nº7 porteña caratuló la causa como “lesiones graves culposas”, e instó a la Policía de la Ciudad a custodiar el lugar para evitar que haya modificaciones en la escena del suceso.