Calor y falta de luz

Calor y falta de luz

El sistema de distribución eléctrica en el Area Metropolitana de Buenos Aires dejó de prestar servicio a un promedio de 10 mil a 35 mil usuarios a lo largo del día de ayer. Ese número de usuarios afectados se dio a cada momento y de manera más o menos rotativa, con lo cual el total de hogares y comercios que sufrió cortes en algún momento de la jornada fue mucho mayor. Por ejemplo, durante el domingo, que también fue muy caluroso, hubo un flujo menor de cortes pero fueron afectados un total de 174.603 usuarios. Además, la semana pasada se produjo un apagón masivo causado por un desperfecto en una subestación de Edenor.

La falta del suministro afectó a la Ciudad y sus alrededores; Edenor informó que hubo problemas en transformadores ubicados en el barrio de Palermo

Más de 77.000 familias se ven perjudicadas por intermitentes cortes de luz hoy tanto en la Ciudad de Buenos Aires como en el conurbano bonaerense, lo que para las empresas es «normal» u obedece al alto consumo.

La página del Ente Nacional de Regulación de Electricidad (ENRE) contabilizaba a las 17 un total de 52.599 usuarios de Edesur afectados por cortes de luz, mientras que Edenor acusaba 24.917 usuarios en esa condición.

«Hoy tenemos récord de consumo y después de dos días de alta exigencia de la red, el nivel de cortes es menor a otros años gracias a las inversiones que se hicieron. No obstante todavía falta mucho por hacer para tener una mejor calidad de servicio», dijo a Télam Alejandra Martinez, vocera de Edesur, al fijar la posición de la distribuidora.

La vocera sostuvo que en diciembre «bajamos un 12% la cantidad de cortes y un 35 % la duración de los mismos».

No obstante, los vecinos de San Telmo que bajaron al mediodía de los edificios para reclamar porque atravesaban un nuevo corte de luz cuando la sensación térmica rondaba los 45 grados, denunciaron que son las mismas cuadrillas de Edesur las que «previendo el calentamiento de los equipos» cortan la luz.

En la Capital Federal, los barrios afectados son: Almagro, Caballito, Mataderos, San Cristóbal, Versalles, Villa Crespo, Lugano, Agronomía, Palermo, Recoleta, San Telmo y Villa Urquiza.

Pedro Bussetti, titular de la entidad de consumidores Deuco, plantea que “la calidad del servicio no ha mejorado, persisten los cortes de suministro por largos períodos, no hay respuesta a los reclamos y se han extendido las quejas por facturación incorrecta o estimación de consumos. En cambio, lo que ha mejorado es la rentabilidad de las empresas”.

Según los últimos datos oficiales, entre marzo y agosto de 2017 fueron afectados más de 1,2 millón de usuarios con corte de servicio y las empresas ofrecieron resarcimiento por un monto promedio de 290 pesos por cada usuario. Entre septiembre de 2017 y febrero de 2018 creció hasta el millón y medio la cantidad de usuarios afectados, con un resarcimiento promedio de 390 pesos. Entre marzo y octubre del año pasado fueron afectados 1,4 millón de usuarios, es decir, 200 mil más que en el mismo período del año pasado. El resarcimiento promedio fue de 317 pesos. “Las bonificaciones son insignificantes en comparación con los cuadros tarifarios vigentes y con los perjuicios que ocasionan a los usuarios los cortes de energía y las deficiencias del servicio”, advierte Bussetti.

Claudio Boada, de la Unión de Usuarios y Consumidores, consideró que “no hay problemas en la parte de la generación ni el transporte de la energía eléctrica sino en la distribución. Esto es falta de inversión, todo el sistema está atado con alfileres y cuando hay altas temperaturas se producen los cortes por elevado consumo. El punto es la calidad del servicio, porque el servicio público de distribución casi no presenta inversiones obligatorias sino resultados obligatorios. El servicio tiene que ser correcto, de otra forma las empresas podrían decir que cumplieron con las inversiones y que se desligan de los resultados. Hay zonas del conurbano que no centran la atención de los medios en donde son usuales los cortes de luz durante días y los resarcimientos no son significativos”.

Hasta ahora, el momento más crítico del verano en materia de cortes se dio el martes pasado, con el apagón masivo por el incendio de una subestación de Edenor en Morón. En esa oportunidad, no sólo cientos de miles de usuarios se quedaron sin energía eléctrica sino que el corte afectó a las líneas B y D de subte y a los ferrocarriles Urquiza y Sarmiento. “Quedó en evidencia que los servicios esenciales requieren tener varias vías independientes de abastecimiento eléctrico”, pidió Boada.

 

 

Maria F.